15 abril, 2012

Largo domingo de hartazgo


Acabar con todo.

Esa sensación que comienza

en las costillas

y sube hasta la garganta

para inundar los lacrimales

secos y ardientes

de rabia, asco, náusea.

La bilis espumosa

burbujeando en mis entrañas,

a punto de estallar

por cualquier lado,

clavándome las uñas en las manos,

en mis dedos húmedos,

suplicantes de un cigarro encendido.

Sangro, me alimento, lloro,

renazco

en una suerte aciaga

pegada a mis talones

y bolsillos.

Esa rabia que me ahoga dulce

y dolorosamente...

y no me deja respirar.


5 comentarios:

harazem dijo...

Uf, creía que te vería esta mañana en el Potro en lo de Emplazarte. Si hubieras ido igual se hubiera mitigado un poco ese dolorazo que muestras.

Elvira dijo...

Pues sí, me he estado muriendo de envidia viendo las fotos. Pero bueno, hoy el horno no estaba pa' bollos, como suele decirse, así que sólo me queda tocar madera para que la próxima no la prohíban :P

Elvira dijo...

Por cierto... ¿es un tirón de orejas? :)

harazem dijo...

¿Un tirón de orejas? Crees que te las mereces por algo?

Elvira dijo...

¿Yo? Siempre. Debería quedarme castigada todos los domingos :)